Las lentes de contacto deberían tener la capacidad de desintegrarse, de auto destruirse, de emitir un aviso cuando lleva demasiadas horas en el ojo... de momento esto es ciencia-ficción, así que voy a contar lo que sucede cuando se abusa o se utilizan las lentes de contacto de una forma diferente a la aconsejada por el óptico-optometrista que las ha adaptado.
Una lente de contacto es un producto sanitario que debe cumplir con una normativa muy exigente. Están fabricadas con materiales compatibles con la fisiología del ojo para no provocar lesiones y que las alteraciones sean inexistentes o mínimas y tolerables.
Cada lente de contacto se adapta de manera individualizada al ojo del usuario, teniendo en cuenta los siguientes factores:
- Tipo de error refractivo:miopía, hipermetropía, astigmatismo, presbicia (vista cansada)
- Tamaño y curvatura de la córnea, dato de extrema importancia para determinar el tamaño y forma de la lente de contacto
- Posición de los párpados, frecuencia de parpadeo, cierre completo, alteraciones en la linea de las pestañas
- Calidad y cantidad de lágrima: Una de las más importantes teniendo en cuenta que hoy en día la sequedad ocular se esta convirtiendo en algo común en nuestra sociedad debido en gran medida a la contaminación, la alimentación y el uso de dispositivos electrónicos.
- Patologías asociadas al ojo: conjuntivitis, orzuelos, inflamación de los párpados, procesos de alergia...
- Uso que quiere darle el paciente: un par de días a la semana, todos los días, 10 horas diarias...
Del estudio completo para la selección y adaptación de la lente de contacto más adecuada se encarga el óptico-optometrista con conocimientos en contactología. Del mismo modo es el óptico-optometrista quién determinará las horas de uso, el tipo de limpieza y la frecuencia de las revisiones para asegurar una salud ocular correcta.
¿qué sucede cuando no se cumplen las normas?:
Existe un deterioro de la salud visual, a corto, medio y largo plazo, lo que en ocasiones se convierte en patologías más o menos severas y en algunos casos el uso de las lentes de contacto tiene que ser prohibido, no pudiendo retomar el uso por el riesgo que implica.
Los Pecados Imperdonables del uso de lentes de contacto
- Utilizarlas más horas de las aconsejadas por el optico-optometrista
- No utilizar los productos de mantenimiento, limpieza y desinfección
- Alargar la duración de las lentes de contacto
- Dormir con las lentes de contacto (salvo los casos en los que esten indicadas para poder hacerlo)
- Descuidar la higiene del estuche portalentes.
- Descuidar la higiene del ojo
- No realizar las revisiones correspondientes
- Utilizar el agua como la gran solución para limpiar estuches y lentes de contacto.
Como vale más una imagen que mil palabras, os presento un estuche porta lentes que bien podrían contener todas las especies de patógenos, bacterias y cualquier sustancia nociva que podamos imaginar. (Siento que la imagen sea tan desagradable, pero es necesario darlo a conocer)
El usuario cometía absolutamente todos y cada uno de los pecados imperdonables, añadiendo que la lente cuando le molestaba se la quitaba, la daba un enjuagado dentro de su boca y se la ponía de nuevo. Es cierto que es un caso extremo, pero no es el único que me he encontrado, así que la información que damos en ocasiones se queda escasa o no es entendida. Está claro que algo falla.
Las consecuencias no se hicieron esperar y el paciente tenía una infección muy severa, con una blefaritis descontrolada, aun así siguió utilizando sus lentes de contacto, hasta que vino a verme porque la lentilla le molestaba. Os aseguro que el problema NO era la lentilla. Ni que decir tiene que le requise la lentilla para proceder a una completa desinfección de la misma mientras acudía al oftalmólogo para recibir el tratamiento farmacológico correspondiente. Fueron necesarios 15 días para resolver la situación, en este caso con final feliz, aunque la visión debido a las úlceras corneales que acumula por los otros malos usos no supera el 40%.
Los laboratorios de soluciones de limpieza y mantenimiento incorporan en cada nuevo envase un estuche portalentes nuevo, que no es para que los usuarios de lentes de contacto hagan colección, es para "CAMBIARLO", "RENOVARLO" "SUSTITUIRLO"... si muchos usuarios no los cambian quizá es porque no les hemos dicho asi de claro que lo hagan.
Así que por favor, eduquemos, enseñemos, expliquemos claramente las consecuencias de abusar o mal usar las lentes de contacto, y si es necesario darlas por escrito, por si se trata de una usuario "despistado".
María de Blas Alonso
OOD
Muy buen post!! Además, en muchos más casos de los que nos creemos los clientes adquieren las lentes de contacto y soluciones de mantenimiento a través de páginas web o en el caso de las soluciones de mantenimiento en supermercados sin saber si es lo más adecuado para su salud ocular, por ello debemos de informar muy bien a los pacientes del tipo de lente de contacto que necesitan así como de la solución de mantenimiento que se ajusta mejor a sus necesidades. También esto es muy importante en los casos en los que se necesita un determinado tipo de lágrima artificial pues hay que explicarles muy bien el tipo que necesitan y por qué puesto que luego vienen a nuestra consulta con problemas como, "no veo","tengo el ojo muy irritado", "la lente está mal, me molesta" y nosotros nos volvemos locos pensando en que ha podido ocurrir hasta que indagamos y descubrimos estos casos de "intentos de ahorro".
ResponderEliminarYo puedo entender que si un usuario de lentes de contacto no ha sido correctamente informado de las consecuencias de no utilizar las lentes recomendadas, los liquidos recomendados y de pasar a las revisiones recomendadas, no lo haga. Es cometido del optico optometrista explicarlo, educarle en la forma correcta y así evitar las nefastas consecuencias que ocurren en algunos casos.
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